La Unión Europea ha aprobado varias leyes que cambian la forma en que las grandes empresas tecnológicas deben desarrollar sus smartphones. Ahora, se está estudiando un nuevo proyecto de ley para devolver las baterías extraíbles a estos y otros productos.
El siguiente paso del legislador europeo consiste en ofrecer a los usuarios la posibilidad de sustituir las pilas presentes en sus aparatos electrónicos. También se invocan preocupaciones medioambientales para justificar esta decisión.
La Unión Europea quiere pilas reemplazables en los aparatos electrónicos
El nuevo proyecto de ley de la Unión Europea aún se está debatiendo, pero ya tenemos una idea general de su finalidad. Este organismo legislativo quiere que todos los productos tecnológicos adopten una batería que pueda ser sustituida fácilmente por los usuarios.
La gama de productos cubiertos por la posible ley va más allá del mercado de los teléfonos inteligentes. También abarcará las baterías para el encendido y alumbrado de vehículos, medios de transporte ligeros como motocicletas o bicicletas, vehículos eléctricos y baterías industriales.
Las empresas que operan en estos mercados dispondrán de tres años y medio para adoptar las imposiciones que impone este documento. Sin embargo, no será sorprendente que varias empresas ofrezcan resistencia a la adopción de estas normas.
Cada pila tendrá que llevar etiquetas y códigos QR que proporcionen a los usuarios información esencial como capacidad, rendimiento, durabilidad y composición química. Además, dispondrán de pasaportes digitales con información general sobre el modelo.
La economía circular se hace notar en la nueva legislación europea
Como ya se ha mencionado, la Unión Europea utiliza la baza medioambiental para justificar su nuevo proyecto de ley. Como tal, requerirá un fuerte compromiso con la economía circular haciendo obligatoria la recogida de pilas usadas.
Para ello, el organismo europeo define que en 2023 deberá recogerse el 45% de las pilas usadas. Cifras que aumentan al 63% en 2027 y al 73% en 2030.
En cuanto a los vehículos de transporte ligeros, los objetivos fijados son del 51% para 2028 y del 61% para 2031. Hay que subrayar que todas las pilas, incluidas las industriales, tendrán que recogerse sin costes asociados al proceso.
Hay que subrayar que esta ley aún se está debatiendo, pues todavía necesita la aprobación del Parlamento Europeo y del Consejo Europeo. Sólo tras la finalización de estos procedimientos puede entrar en vigor.
