La leyenda del fútbol persa ha sido una voz de apoyo a las protestas en Irán y ahora se le prohíbe salir del país
Las consecuencias siguen afectando a cualquiera que exprese su apoyo al levantamiento popular de los iraníes contra el régimen de ese país, independientemente de su estatus y posición. Tras las detenciones de futbolistas, ex jugadores y otras personalidades, ahora le toca a Ali Daei, una de las principales figuras del fútbol persa, la confiscación de su pasaporte.
El ex internacional iraní y segundo máximo goleador de la historia de la selección (109 goles, por detrás de Cristiano Ronaldo), regresaba de Estambul (Turquía) cuando las autoridades le retiraron el pasaporte. Así, naturalmente, se le impide salir del país.
No era raro ver a Ali Daei señalando con el dedo al régimen iraní en defensa de los civiles, además de ser uno de los más firmes partidarios de la presencia de mujeres en los estadios. La ola de revueltas y protestas que estalló en Irán tras la muerte de Masha Amini fue sólo el ejemplo más reciente.
El gobernador de la provincia de Teherán había advertido recientemente que «los famosos que soplaron en las brasas de los disturbios serán perseguidos». Ali Daei se suma a una lista de objetivos que crece día a día.
